miércoles, 31 de agosto de 2011

Los títulos nobiliarios nabarros y el futuro de Nabarra




Partiendo de la incuestionable premisa, de que a comienzos del siglo XXI es incomprensible para la mayoría de ciudadanos y ciudadanas de a pie de la totalidad territorial de Nabarra, la instalación de una Familia Real nabarra que produciría enormes gastos sencillamente en su faceta representativa, algo que ya señaló en su día el que fuera miembro del Consejo Real de Nabarra hasta hace unos pocos años, el historiador y ex profesor de la prestigiosa Universidad de Cambridge, Jon Oria Oses, debemos, mejor dicho, incluso podríamos decir que estamos obligados a tener presente su importancia, no solo a nivel de la legitimidad independentista nabarra ante la Comunidad y la Jurisprudencia Internacional, sino también de su valor frente a la Casa Real española configurada actualmente por la dinastía de la Casa de Borbón, en la continuada lucha pacífica por la recuperación de la plena soberanía del Estado de Nabarra.

La Familia Real española que llega hasta la actualidad, siempre de manera fraudulenta como veremos a continuación, ha ido utilizando los títulos de “Príncipe de Viana” e incluso el de “Soberano de Navarra” de manera reiterada desde la brutal, ilegal y violenta invasión y ocupación del Reino de Nabarra del año 1512. Tras la denominada guerra de sucesión a la Corona de España, que significó el cambio de la dinastía de Habsburgo o Austria por la de Bourbon o Borbón, donde esta última llevó a cabo horrendos genocidios contra los españoles del año 1700 por hacerse con el trono, tuvo lugar el conocido como Tratado de Utrecht, donde la cláusula firmada en el año 1714 especifica claramente que Felipe V de Borbón y todos sus descendientes de la rama de Anjou, no pueden ser reconocidos nunca como reyes de Francia y tampoco como reyes de Nabarra.

Así pues, la utilización a lo largo de la historia de los títulos nobiliarios de rey de Nabarra y de príncipe de Biana por parte de cualquier descendiente de Felipe V de España, ya sean estos de la denominada rama isabelina o de la muy conocida por estos parajes rama carlista, es una simple e incuestionable usurpación, tanto de índole político como jurídico, de los mismos.

Por otro lado, a pesar de lo que algunos y algunas puedan pensar, de existir algún descendiente de Louis XIV de France, firmante junto a su sobrino Felipe V de España del mencionado Tratado, este tampoco tendría derecho alguno en utilizar los títulos nobiliarios de rey de Nabarra y de príncipe de Biana. Esto es debido a que el 7 de junio del año 1607, en las Cortes soberanas nabarras situadas en Pau, fue aprobado el testamento de Enrique de Bourbon y Albret, III de Nabarra y IV de Francia, en el cual permanecían dividas las Coronas de Nabarra y de Francia, especificándose además, que la Corona de Nabarra volvía a la Casa de Albret cuyo titular más directo por aquel entonces era la duquesa de Loundum.

Actualmente y tras la muerte de Pierre-Desiré de la Motte-Méssemé, legítimo heredero por vía directa y vertical de los reyes privativos de Nabarra Catalina I y Juan III, la Familia Real de Nabarra ha guardado silencio, siendo los últimos manifiestos realizados al Pueblo-Nación de Nabarra los del que fuera Jefe Custodio de la Corona de Nabarra, el difunto Timothy de Foix, el propio Pierre-Desiré de la Motte-Méssemé, doña Leonor de Foix y Blas de Beaumont-Evreux, los cuales son muy interesantes y además recomiendo leerlos a aquellas personas que estén interesadas en la libertad de nuestro País, Nabarra, al dejar muy a las claras cual es la postura de la Familia Real nabarra sobre el Estado de Nabarra.

Desde mi postura como Secretario General de la Comisión Soberanista de Nabarra y con un pensamiento político sobre el planteamiento institucional para el Estado de Nabarra muy alejado del sistema monárquico, debo decir que soy actualmente codemandante político y civil contra el Reino de España y también, contra la República de Francia en las Naciones Unidas junto a Blas de Beaumont-Evreux, actual Jefe de la Casa Real de Nabarra. Por ello insto públicamente al duque de Beaumont-Evreux y a los herederos de Pierre-Desiré de la Motte-Méssemé, a la realización de nuevos manifiestos destinados a la Nación Nabarra, en los cuales se reafirmen en las posturas realizadas con anterioridad y especificando una vez más su postura para una futura gobernabilidad soberana para el Estado de Nabarra, pues ello nos llevaría a consolidar ante el Pueblo nuestra postura independentista y soberanista, sin olvidarnos de los resultados políticos que nos pueden dar ante la Comunidad Internacional. 

                                                                                                                                Iñigo Saldise Alda

1 comentario:

  1. Entonces, tras el fallecimiento de Pierre-Desiré de la Motte, ¿Quíen es el actual heredero?

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